Fotografía surrealista para estremecer la vida
Por Mario Mendicuti Abarca
La exposición Lee Miller. Fotógrafa surrealista es la primera retrospectiva en México de la artista y modelo inglesa, nacida en Estados Unidos. Curada por Stefan van Raay, se le permite al espectador doblegar la mirada: recorrer visualmente la vida de Miller, a la vez que se observa desde su perspectiva la vida misma.
Desde sus colaboraciones con Man Ray, hasta sus fotografías de la liberación de París y de los campos de concentración al final de la Segunda Guerra Mundial, se percibe una realidad trastocada por sí misma, en la que los espacios, los objetos y las personas se amalgaman y deforman. Los ojos se abren y hacen inmortal el segundo en el que la desolación, el juego, el sinsentido y el asombro se mezclan.
Lee Miller fue, en un comienzo, modelo de su padre y de la revista Vogue. Posteriormente establecería vínculos con el grupo surrealista de París, con los que exploraría la imagen como algo que va más allá de una simple reproducción. Asimismo, en Nueva York instaló un estudio propio, lo que le permitió sobrevivir, al tiempo que desarrollaba su creatividad.
Otra parte importante de su producción artística se realizó en El Cairo, donde vivió de 1934 a 1939 con su esposo, el empresario egipcio Aziz Eloui Bey. En este periodo de su vida los espacios exteriores llaman a la introspección. Sus fotografías parecen ser tomadas desde el marco de una puerta, donde el adentro y el afuera se unifican.
Para 1939 comienza una relación con Roland Penrose, con quien pasaría el resto de su vida. Durante los bombardeos alemanes en Londres y en su posterior época como corresponsal de guerra para la revista Vogue, retrata la triste cotidianidad del conflicto bélico en Europa Central. Mujeres utilizando máscaras contra bombas incendiarias, reencuentros, pilas de cuerpos, niños a punto de morir, fusilamientos y cierta banalidad que enciende nuevas esperanzas de paz son algunos de los momentos que se revelan a partir de su subjetividad.
Sus últimos años los pasó en Inglaterra. Su casa, Farley Farm House, se convirtió en punto de encuentro para amigos y artistas, a los cuales retrataría constantemente, ya con pleno uso de su lente surrealista, la cual nunca necesitó ser escandalosa para ser desconcertante.
Esta exposición permanecerá hasta el 21 de febrero de 2016 y es posible gracias al Lee Miller Archive[1], resguardado y promovido por su hijo, Antony Penrose. El catálogo está disponible de manera digital y es de libre acceso. La oportunidad de presenciar el mundo a través de una mirada que nunca envejeció y que está en constante búsqueda de nuevas maravillas se encuentra en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México.