Bahidorá 2022: una década de ser un ritual sonoro que libera épicas emociones

La décima edición de Bahidorá no sólo significó el alcanzar una década de ofrecer a los amantes de la música actos que se distinguen por su diversidad y eclecticismo sonoro, también fue el regreso de un festival que tiene una de las mejores experiencias en nuestro país, y nos demostró que celebrar la vida, la naturaleza y la música es una de las mejores cosas que puedes hacer tras una difícil etapa en la historia mundial.

La primera noche del carnaval se realizó el pasado viernes 18, de febrero, donde el principal escenario fue El Umbral. Ahí se dieron cita diversos exponentes de la escena techno, lo cual dio pie al inicio de un carnaval lleno de mucho baile y calor nocturno. 

Esta inauguración también fue el momento perfecto para también celebrar el aniversario del club berlinés Tresor, por ello tuvimos a productores muy dinámicos como DJ Minx, Joey Beltram y Tygapaw

El segundo día del festival (sábado 19 de febrero) comenzó con la participación de VACACIÓN, dúo integrado por Caloncho y El David Aguilar, quienes nos entregaron una sesión digna para un medio día lleno de calor, sombreros y cuerpos en traje de baño. Durante su participación interpretaron canciones de su álbum Tiempo Compartido y uno que otro tema inédito. 

Mientras esto sucedía en el escenario Sonorama, otras actividades comenzaron a realizarse en esta edición, como las charlas programadas en El Foro La Linterna, las sesiones de yoga y las de músico terapia. 

Cuando el comenzaba a incrementar su poder, Agrupación Cariño arribó al escenario principal para seguir aumentando la temperatura con su sabrosa cumbia y puso a todos los asistentes a sacar los pasos prohibidos. 

Después llegaría una de las bandas más esperadas de esta edición: Kings of Convenience. El dúo llegó al carnaval para invadirnos de tranquilidad, ritmos suaves y letras de amor que cautivan hasta el alma. De ellos pudimos escuchar temas de su más reciente álbum titulado Peace or Love, como lo fueron Fever y Rocky Trail

Este show significó el regreso de la banda tras más de una década de no visitar nuestro país, así que los asistentes del festival tuvieron la primicia de ver el retorno de Erlend Øye y Eirik Glambek Bøe. 

Tras finalizar este grandioso espectáculo de emotividad Sonorama, llegó el turno de Helado Negro. Pará este momento el calor había dado un poco de tregua, y las nubes comenzaron a aparecer. El artista radicado en Estados Unidos nos involucró en temas de su álbum Far In y de esta manera envolvió al público en una atmósfera taciturna y disfrutable. 

Cambiando de escenario, Pahua nos dio un concierto lleno de ritmo y bases electrónicas en La Estación con canciones de su más reciente material llamado La Cura (donde Traketeo fue una de las que más gozamos). Ahí mismo Petite Amie, nos presentó su álbum homónimo, el cual es una mezcla de psicodelia, baile y distorsiones. Ejemplo de ello son sus temas Refugio y Elektro, ambos muy recomendables. 

Siguiendo en La Estación, Rubio llegó para desatar el poder de su pop electrónico con dotes de experimentación. Ella nos dejó escuchar tracks de su álbum Mango Negro, aunque también interpretó su más reciente sencillo Invierno

Regresando al escenario principal, Greentea Peng puso las bases sonoras para convertir al festival en una fusión de reggae, R&B y letras de protesta con su más reciente producción llamada Man Made, por lo que fue la ocasión perfecta para entra en un mood tranquilo y en ocasiones espiritual.

Una vez que el público comenzó a llegar a Sonorama cada vez más y poco a poco se fue convirtiendo en un mar interminable de personas, supimos que el acto principal estaba a punto de comenzar. 

El turno de James Blake por fin llegó y la nostalgia mezclada con sentimentalismo y bases electrónicas no se contuvo. El artista inglés comenzó su concierto entre una interesante combinación de luces, en ocasiones totalmente rojas y otras veces azules, para darnos una de las mejores experiencias de Bahidorá

Este juego de luces combinó perfectamente con su voz característica y sus letras que apelan al amor, pero también a la melancolía. 

Entre los temas que pudimos escuchar se encuentran Life Round Here, Limit To Your Love, Life Is Not The Same y Retrograde, por lo que fue un set que combinó canciones de su más reciente álbum Friends That Brake Your Heart y de producciones anteriores.

Tras finalizar esta épica presentación que hizo gritar a muchos de los asistentes, regresamos a La Estación para ver los shows de Sofía Gabanna, Dawer x Damper y Perreo Millenial, los cuales fueron una tremenda sucesión de rap y ritmos peligrosos que seducen el cuerpo. 

Además de estas presentaciones no podemos olvidar el interminable baile que pusieron los Djs en El Amate, escenario dedicado al género electrónico que prende la vida nocturna con beats artificiales y mágicos. En este escenario participaron artistas como Cashu, DJ Boring y RROXYMORE.

Pero también no es posible dejar a un lado El Asoleadero, donde la buena vibra y una buena refrescada nadando mientras escuchas increíbles sets, se vuelve algo único en este carnaval. 

El último día (domingo 20 de febrero) fue perfecto para tomar el sol, seguir disfrutando de la música y pensar que valió la pena esperar una edición más de este carnaval. Sin duda, este décimo aniversario de Bahidorá nos dejó tan satisfechos como en ocasiones anteriores o ¿tú qué dices?  No olvides decirnos tu opinión y disfruta de nuestra galería. }